A pesar de que existen ventanas de tiempo en donde es normal que aparezca cierta habilidad en los niños,-recordemos que cada uno es diferente y por lo tanto ningún niño sigue exactamente el mismo "ritmo" que otro-, sí hay ciertas cosas que deben estar presentes en determinados momentos del desarrollo, ya que reflejan que el sistema nervioso está funcionando de manera adecuada y el niño se está adaptando al entorno.
Se ha demostrado que recibir estimulación temprana, tras un diagnóstico precoz de rezago o retraso en el desarrollo, permite al niño o niña alcanzar mejores resultados y enfrentar menos dificultades a largo plazo, en comparación con aquellos casos en los que se demora en consultar, diagnosticar y tratar. Las intervenciones tempranas, realizadas durante los períodos críticos de desarrollo neuronal, son fundamentales para asegurar el mejor resultado posible. ¡No debemos esperar si sospechamos que algo no anda bien!
Por esto existen las llamadas "Banderas Rojas", que son señales específicas a las que debemos estar atentos, ya que podrían indicar que algo está ocurriendo en el desarrollo del niño o niña. Las banderas rojas pueden aparecer en cualquier área del desarrollo: motor, cognitivo, socioafectivo, sensorial, lenguaje.
A nivel motor, recordemos que la forma en que un niño se mueve y se comporta, refleja la maduración de su sistema nervioso y la interacción de su cerebro en desarrollo con el entorno que lo rodea.
Banderas Rojas Generales (en cualquier etapa)
Pérdida significativa de habilidades. Ejemplo: tu hijo o hija podía mantenerse sentado por sí solo y algunas semanas después no es capaz de hacerlo.
Tu hijo o hija no parece responder a estímulos visuales o auditivos.
Interacción social pobre con adultos u otros niños.
Asimetría en los primeros 3 años - Hay diferencia entre el uso del lado izquierdo y derecho del cuerpo en fuerza, movimiento o tensión muscular. Ejemplo: tu hijo o hija siempre usa la mano derecha para tomar todos los juguetes.
Movimientos muy "sueltos y flojos" / Movimientos muy “tensos y rígidos”
A continuación te contamos las banderas rojas más relevantes dentro del primer año:
Nacimiento a los 3 Meses
No responde a ruidos fuertes
Pobre o escaso contacto y seguimiento visual (sigue un objeto que se mueve con los ojos)
Cabeza muy extendida de forma continua (como si quisiera mirar hacia atrás) y/o rotada siempre hacia el mismo lado
La cabeza no usa la línea media (al centro del cuerpo, mirando al frente), esto se da alrededor de los 2 meses.
No genera mucho movimiento con sus brazos ni patalea con las piernas
Brazos muy rígidos, cuesta vestir y desvestir
Marcada asimetría entre un brazo y el otro
4-8 meses
A los 4 meses no sostiene por completo y de forma controlada la cabeza
A los 4 meses aún no emite sonidos
A los 4 meses aún no se lleva objetos a la boca
A los 7 meses aún no gira hacia los lados
Prefiere estar acostado a otras posturas, se mueve poco
Se le hace muy difícil estar de guatita, no logra jugar en esa posición
9 a 12 Meses
Prefiere estar sentado la mayor parte del tiempo
La postura en sentado es muy estática, siempre usa la misma y no sale de ella o le cuesta mucho cambiar a otra
A los 10 meses no logra sentarse por sí mismo
A los 10 meses aún no se desplaza (puede ser gateo, arrastre, camina con/sin apoyo, trepa...)
No manipula los juguetes, los toma y suelta
A los 11 meses no logra ponerse de pie con apoyo
Su exploración del ambiente es limitada
Recuerda que es una mirada general, si tienes dudas o crees que algo no anda bien, siempre te recomendamos planteárselas a tu pediatra o buscar un profesional especialista que te acomode y te dé confianza.
Por último, y muy importante: el desarrollo de un niño es integral y abarca diversas áreas de desarrollo, por lo que la parte motora es solo una parte de este proceso. Un niño puede mostrar señales de alerta tempranas en las diferentes áreas, ¡Tú eres el que conoce mejor a tu hijo o hija!